Panteísta VI



La felicidad es efímera, es solo un ápice de esta vida.

Mi corazón esta ahora derrotado, te llevaste todo lo que tenía;
todo era tuyo. Ahora solo queda un infinito vacío en mi interior. Un vacío que con solo una caricia tuya se llena, con solo un beso podría rebalsar, que con un abrazo tuyo puede abarcar todo el universo y meterlo en mi corazón. Me enamoré y no fue suficiente. Ahora mi alegría se ha ido, no sé si regresará.

Mi refugió no podría ser otro que los brazos del mejor amigo de los desdichados, el alcohol. Ese que siempre me ha esperado. La música que aunque no alegre mi corazón hará que me duela más y me podré sentir vivo por ese dolor, la soledad que siempre me tenderá la mano para acompañarme. Quisiera poder ser lo que tu querías. Ahora mi alegría se ha ido, no sé si regresará.

Mis brazos están sin fuerza, voy a llorar de pena, no sabré vivir sin tus caricias, sin tus besos. Voy a extrañar tu sonrisa, tu risa, tus perfectas imperfecciones, todo eso que nunca fue mío y que ya no lo será jamás. Solo quería hacerte feliz y no pude, soy un tonto por pensar que podría. Ahora que mi alegría se ha ido, no sé si regresará.

Comentarios

Publicar un comentario

Gracias por tu comentario.